Proyecto de acondicionamiento e interiorismo para la implantación de un espacio de coworking en una planta completa, con capacidad para 160 personas.
La intervención estructura el espacio en despachos privados, salas de reuniones y cabinas one-to-one, articulados en torno a áreas comunes concebidas como espacios de relación y encuentro entre los usuarios del coworking. Estas zonas fomentan la interacción y la sensación de comunidad, integrando una zona de office y áreas de descanso que favorecen la convivencia y el intercambio profesional. El diseño incorpora también espacios técnicos para instalaciones, salas de rack y zonas de almacenamiento, configurando un entorno contemporáneo, flexible y representativo.







